La crisis económica en Argentina está teniendo un impacto significativo en la mayoría de las familias del país, quienes se encuentran en una situación precaria y deben recurrir a diversas formas de financiamiento fuera del sistema bancario para llegar a fin de mes.

Un estudio realizado por la consultora Focus Market reveló que un alarmante 82,6% de los hogares argentinos ha comenzado a acumular deudas con entidades financieras no bancarias. Estas deudas se generan a través de la compra de bienes y servicios a crédito, el pedido de dinero prestado y el incumplimiento en el pago de servicios e impuestos.

Según Damián Di Pace, director del informe, los hogares argentinos están experimentando una pérdida significativa de su poder adquisitivo, lo que los obliga a utilizar sus ahorros para cubrir los gastos básicos y, al mismo tiempo, a seguir endeudándose.

En cuanto a los métodos más utilizados por las familias para obtener financiamiento, se destaca que un 26,3% recurre a préstamos personales, mientras que un 26,1% realiza compras a crédito en los comercios de proximidad, solicitando crédito o «fiado».

En relación a los impuestos, un preocupante 11,9% de los hogares ha dejado de pagarlos, lo que evidencia la dificultad de cumplir con las obligaciones tributarias. Además, un 6,9% de los hogares tampoco abona las expensas de sus viviendas.

Ante la falta de acceso a crédito formal, muchas familias recurren a préstamos de amigos o familiares, con un 9,3% optando por esta alternativa. Otro recurso utilizado es la venta de planes de autos, con un 10,6% de los hogares tomando esta medida desesperada para hacer frente a los gastos cotidianos.

Estos datos reflejan la difícil situación económica por la que atraviesan los hogares argentinos, quienes se ven obligados a adoptar medidas desesperadas para mantenerse a flote en medio de la crisis. La pérdida de poder adquisitivo, el aumento de los precios y la falta de oportunidades laborales son factores clave que han llevado a esta realidad preocupante en el país.