En el proceso de armado político del PRO, surgen conflictos internos debido a la propuesta de Horacio Rodríguez Larreta de incorporar al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti.

Patricia Bullrich, destacada figura del partido, responsabiliza a Larreta por esta situación y expresa su desacuerdo con la idea de sumar a Schiaretti, argumentando que se deben respetar las reglas del juego y mantener la transparencia en las decisiones. Bullrich asegura que no habrá una ruptura en la alianza, pero sí competirán en las elecciones.

La precandidata a la presidencia, Patricia Bullrich, critica la inclusión de actores que han mostrado una actitud distante hacia Juntos por el Cambio y que han apoyado al oficialismo. En este sentido, minimiza la relevancia de la posible incorporación de José Luis Espert en el debate.

Además, Bullrich pone en duda las motivaciones detrás de la decisión de Larreta de incluir a Schiaretti. Cuestiona si alguien, al plantear la ruptura de Juntos por el Cambio, está trabajando en beneficio del gobierno y buscando la destrucción de la opción de cambio que actualmente tiene Argentina.

Estas declaraciones reflejan las tensiones y diferencias de opinión dentro del PRO en cuanto al rumbo político y las alianzas estratégicas.