En la cumbre del Mercosur que se llevará a cabo en Puerto Iguazú, los presidentes de los países miembros se reunirán para discutir importantes temas, especialmente las nuevas exigencias ambientales de la Unión Europea (UE) para concretar el tratado de libre comercio bilateral. Durante la reunión, el presidente argentino Alberto Fernández entregará el mando al mandatario brasileño Luiz Lula da Silva. Esta reunión también coincide con el inicio de la presidencia española de la UE.

En la reunión del Consejo Mercado Común (CMC) participarán los cancilleres de Argentina, Brasil, Uruguay y Paraguay, junto con Bolivia. También se encontrarán los ministros de Economía y los presidentes de los Bancos Centrales. Esta reunión servirá de antesala para la reunión semestral del Consejo del Mercado Común y la Cumbre de Jefes de Estado, que se celebrará al día siguiente.

El principal tema a tratar será la presión de la UE para que el Mercosur cumpla con estándares climáticos y objetivos del Acuerdo de París. La UE ha enviado un borrador con propuestas adicionales relacionadas con el medio ambiente al tratado alcanzado en 2019, que aún no ha entrado en vigencia. Sin embargo, la postura de Lula ha sido de oposición a cualquier tipo de condicionamiento, a pesar de que Brasil está intentando cambiar su política ambiental para frenar la deforestación y la minería en el Amazonas.

Las negociaciones entre el Mercosur y la UE se han vuelto más complejas, y los presidentes de la región deberán elaborar una contrapropuesta a las demandas enviadas por la UE. Se espera que la respuesta oficial del Mercosur a la UE sobre este tema demore al menos un mes. Mientras tanto, se llevará a cabo una cumbre entre los jefes de Estado de la UE y los de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en julio.

El acuerdo entre el Mercosur y la UE se ha dilatado debido a las diferencias en temas ambientales. Sin embargo, España asumió la presidencia semestral del bloque europeo y busca impulsar una mayor relación con América Latina. En este contexto, se encuentra el proyecto económico denominado Global Gateway, que contempla préstamos y subvenciones a sectores clave de la región.

Además del tema ambiental, también se discutirá la posibilidad de un acuerdo comercial con China, el eventual regreso de Venezuela al bloque y la propuesta de Lula de integrar nuevos acuerdos comerciales con otros países.