La precandidata presidencial Patricia Bullrich hizo una denuncia grave durante su participación en el foro «Iberoamérica: Democracia y Libertad». Durante el evento organizado por la fundación Internacional para la Libertad, Bullrich afirmó que a los empleados públicos del interior del país se les controla el voto.

Según sus palabras, en 13 provincias el Estado ejerce un dominio autoritario sobre los empleados públicos, impidiéndoles ejercer su derecho al voto de manera libre. Bullrich describió esta situación como un sometimiento total por parte de las autoridades.

Además, la precandidata destacó que en Argentina, de las 23 provincias, 13 tienen más empleo público que empleo privado. Estas provincias funcionan como «cajas registradoras», ya que reciben fondos del gobierno nacional a través de la coparticipación federal de impuestos, que utilizan para pagar salarios y llevar a cabo obras y proyectos.

Bullrich también señaló que la educación y la salud en el país están en una situación devastadora, lo que ha llevado a un modelo de sometimiento. Según su perspectiva, el Estado provee recursos a los sectores más pobres, pero empobrece a aquellos que generan riqueza. Además, afirmó que el Estado brinda recursos a empresas y sindicatos para perpetuar este modelo de sometimiento.

Estas declaraciones reflejan la preocupación de Patricia Bullrich sobre el control y dominio estatal en diferentes aspectos de la vida en Argentina, así como la disparidad entre los sectores más pobres y los que generan riqueza en el país.