El Fondo Monetario Internacional (FMI) llegó a un acuerdo con Argentina para desembolsar 7.500 millones de dólares en agosto, seguidos de otro desembolso en noviembre. El acuerdo fue ultimado con la participación de Sergio Massa, el ministro de Economía de Argentina, y su equipo económico a través de una comunicación vía Zoom con el FMI.
El acuerdo alcanzado tiene cinco puntos clave: en primer lugar, se espera que el FMI desembolse 7.500 millones de dólares en agosto y otro monto adicional en noviembre. Además, se permite al Banco Central de Argentina intervenir en los mercados, lo que resulta crucial para estabilizar la cotización del dólar.
En segundo lugar, se estableció una meta de déficit fiscal del 1,9%, mientras que el FMI inicialmente reclamaba una meta más exigente del 1,5%. Esto representó un punto de interés para Massa y su equipo, ya que buscaban alcanzar una cifra más realista para la economía del país.
En tercer lugar, se recalibrarán las metas económicas en función de la sequía que afectó al país. Este factor climático ha influido en la economía, y el acuerdo busca ajustar las metas de manera adecuada a esta situación.
En cuarto lugar, para afrontar vencimientos de deuda inminentes, el país acordó pagarlos con créditos de organismos multilaterales hasta que lleguen los desembolsos del FMI. Esencialmente, se busca crear un «puente financiero» para solventar los pagos antes de recibir los fondos del organismo internacional.
Finalmente, el Staff Level Agreement entre Argentina y el FMI permitirá que el país cancele las deudas que vencen en la semana actual. El acuerdo deberá ser aprobado por el directorio del FMI en la tercera semana de agosto.
La importancia del acuerdo radica en que el FMI desembolsará aproximadamente 10.000 millones de dólares durante lo que resta de 2023. Sin embargo, debido a los plazos ajustados y los vencimientos inminentes de deuda, era imperativo que Argentina construyera el mencionado «puente financiero» para efectuar los pagos.
Por un lado, el acuerdo ha generado expectativas favorables en los mercados, lo que podría contribuir a estabilizar la situación económica del país. Sin embargo, también ha generado ambigüedad en los mercados debido al récord alcanzado por el dólar blue, lo que podría impactar en la inflación.
Sergio Massa, como candidato presidencial, ha centrado su campaña en la gestión económica y en el acuerdo con el FMI. Aunque ha demostrado una habilidad para adaptarse a diferentes escenarios y públicos, en los últimos días, ha concentrado sus esfuerzos en acercarse a gobernadores peronistas y darle un giro peronista a la campaña. No obstante, también ha mantenido su atención en la gestión económica, ya que considera que es su principal activo para ganar apoyo popular.


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