Javier Milei ha dado inicio a una serie de auditorías en cada Ministerio y área del Estado Nacional para revisar su estructura de personal. Estas auditorías serán realizadas por los propios ministerios, que luego presentarán un informe detallado sobre su estado general al gobierno central.
Estas evaluaciones comprenderán tanto la cantidad de empleados permanentes como la planta política y contratados en general. Se estima que alrededor de 9000 trabajadores han sido nombrados, ascendidos o convertidos en personal permanente durante el último tiempo, y todos estos casos serán analizados durante este proceso.
El enfoque principal es verificar si estos nombramientos recientes cumplen con los requisitos legales y si se justifica su permanencia en sus puestos, particularmente en situaciones en las que los ministerios dejarán de existir o serán reducidos significativamente. Se espera que, de estas evaluaciones, surjan decisiones que puedan implicar desde reasignaciones hasta despidos o exoneraciones, especialmente si se detectan irregularidades en los ingresos de personal.
El objetivo principal de Milei es reducir la cantidad de ministerios de 18 a 9, un proceso que ya ha comenzado con las juras del pasado 10 de diciembre. Esto no requiere aprobación del Congreso, aunque cuenta con apoyo político. Esta reforma tiene como fin un ajuste en la estructura estatal, enfocándose en la eficiencia y reducción de gastos.
Se espera que Milei presente al Congreso tres grandes paquetes legislativos que aborden reformas en el Estado, la economía y la política, con propuestas que van desde la desregulación de leyes económicas hasta la simplificación del sistema impositivo. Además, se anticipa la discusión sobre temas como la eliminación de subsidios y restricciones a la emisión por parte del Banco Central.


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