El presidente Javier Milei llevó a cabo un cambio significativo en las Fuerzas Armadas, nombrando una nueva cúpula militar y retirando a 22 generales, marcando así una de las mayores purgas en el Ejército desde 2003. Esta renovación busca dar mayor relevancia a la Fuerza Aérea, designando al brigadier Xavier Isaac como jefe del Estado Mayor Conjunto.

El general de brigada Alberto Presti fue designado como nuevo jefe del Ejército, provocando el retiro de todos los generales con más antigüedad que él. Este movimiento condujo al retiro de 22 altos mandos, incluyendo al teniente general Juan Martín Paleo, quien solicitó su retiro voluntario como jefe del Estado Mayor Conjunto.

La Armada también experimentó cambios, con siete almirantes y tres brigadieres retirados, mientras que en el Ejército, además del retiro obligado de 13 autoridades, se sumaron más salidas. Estos retiros superan los ocurridos en 2003, cuando Néstor Kirchner designó a Roberto Bendini como jefe del Ejército, llevando al retiro de 19 generales más antiguos.

Con un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) vigente y la futura discusión de la ley ómnibus en el Congreso, se plantea la renovación de mandos en las Fuerzas Armadas como una medida clave para el gobierno de Milei.

Entre las nuevas autoridades designadas se encuentran Alberto Presti como jefe del Ejército, Xavier Julián Isaac como jefe del Estado Mayor Conjunto, Marcelo Dalle Nogare como segundo al mando de Isaac, Fernando Luis Mengo como jefe de estado mayor de la Fuerza Aérea Argentina y Carlos María Alleievi como jefe de la Armada. Estos cambios buscan redefinir la estructura y liderazgo de las fuerzas militares en el país.