El presidente Javier Milei presiona para aprobar la Ley Ómnibus sin cambios, pero la oposición se resiste. Milei insta a que se apruebe tal como fue enviada al Congreso, aunque este escenario parece poco probable. Los bloques opositores exigen negociaciones y cambios en el proyecto. Milei confía en el respaldo de algunos gobernadores, confiando en la voluntad de apoyar modificaciones a cambio de la restitución del impuesto a las Ganancias.

Sin embargo, las posturas en la oposición están divididas. Gobernadores peronistas y algunos de Juntos por el Cambio muestran disposición a acompañar el proyecto, pero con alteraciones significativas. Para la Unión Cívica Radical (UCR), hay puntos innegociables como la delegación de facultades legislativas al Ejecutivo, la suspensión de la movilidad jubilatoria y el aumento por decreto, entre otros.

Milei desea que la ley se apruebe antes del 31 de enero, aunque la oposición considera estos plazos inviables. Además, en el peronismo, hay malestar por el manejo del oficialismo respecto a la conformación de las comisiones, y se evidencian reclamos por una mayor discusión en más instancias.

Las posibilidades de consenso y aprobación del proyecto se ven desafiantes. La oposición espera negociar cambios, mientras que sectores peronistas e izquierdistas plantean resistencia. La ley comenzará su debate en comisiones, prometiendo un proceso de discusión intenso y quizás, de posibles negociaciones y acuerdos.