Durante la gestión de Alberto Fernández, la Casa de Moneda enfrentó dificultades para cubrir la demanda de billetes del Banco Central, lo que llevó a subcontratar la producción a fábricas internacionales en Brasil, España, Malta y China.

Sin embargo, una importante deuda en dólares con estos proveedores dejó retenidos 300 millones de billetes de $1000 y $2000 en Malta y China. Con la nueva administración de Javier Milei, se inició la regularización de esta situación y se abrieron licitaciones para traer la carga en avión. Se estima que la deuda con Malta era de US$24 millones y con China de US$11.767.000.

La Casa de Moneda licitó el traslado aéreo de los billetes desde China y Malta hacia el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. Estos billetes no son los de $10.000 y $20.000 aprobados recientemente por el Banco Central, sino un remanente de la gestión anterior. Se especificó que se utilizarán dos vuelos para traer los billetes desde China y tres desde Malta. Las licitaciones tienen la modalidad de orden de compra abierta y se espera que la llegada de los billetes no implique su inmediata circulación, sino que el Banco Central solicitará su entrada al sistema según las necesidades de pago existentes.