En la recta final de la octava revisión trimestral, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Gobierno argentino están en conversaciones para establecer un nuevo programa financiero que facilite la eliminación gradual del cepo cambiario. El Poder Ejecutivo espera recibir un desembolso de USD 800 millones tras cumplir las metas del primer trimestre del año.

El ministro de Economía, Luis Caputo, sugirió que los desembolsos adicionales del FMI podrían acercar al Banco Central a levantar los controles cambiarios. Las discusiones actuales, aunque informales y remotas, se centran en diseñar un nuevo esquema monetario y establecer nuevas metas.

El FMI ha propuesto un sistema de «competencia de monedas», similar a los implementados en Perú y Uruguay, y ha presionado por una tasa de interés real positiva y un crawling peg más acelerado. La portavoz del FMI, Julie Kozack, enfatizó la necesidad de políticas que anclen la inflación y flexibilicen la política cambiaria para mejorar la cobertura de reservas y suavizar gradualmente los controles cambiarios.

El ex director argentino ante el FMI, Héctor Torres, destacó la necesidad de un Banco Central independiente para que el peso pueda competir con el dólar de manera creíble, sugiriendo que se modifique la carta orgánica del BCRA para asegurar su independencia. Las dudas sobre la sostenibilidad del crawling peg y la competencia de monedas persisten, especialmente en el contexto de una alta inflación.

Aunque aún no se ha confirmado una misión oficial argentina en los Estados Unidos o una visita de técnicos del FMI a Buenos Aires, se espera que a fin de mes el directorio del FMI apruebe la revisión y autorice el desembolso de USD 800 millones. Este monto es significativamente menor que los USD 4.700 millones negociados a principios de año debido a la mejora en las reservas netas.

El Gobierno también busca ajustar las metas fiscales y de acumulación de reservas, y está considerando la eliminación del impuesto PAIS y el levantamiento de los controles cambiarios como parte de un nuevo informe del staff del FMI que traerá novedades en la hoja de ruta del programa. Caputo insistió que el financiamiento adicional del FMI es crucial para cumplir uno de los requisitos necesarios para levantar el cepo, relacionado con la relación entre las reservas del BCRA y los pasivos remunerados.