El Gobierno de Argentina está preparando una reforma electoral que implicará una división del proyecto para acelerar su tratamiento en el Congreso. Se prevé enviar la modificación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) al Senado, para que se trate junto con la Boleta Única de Papel (BUP), con la esperanza de que vuelva a Diputados con cambios. Paralelamente, otras partes del proyecto se tratarán en la Cámara baja.

El oficialismo se reunirá la próxima semana con los jefes de bloque del Senado para discutir la reforma. En este encuentro participarán los vicejefes de Gabinete, José Rolandi y Lisandro Catalán, así como la secretaria de Planeamiento Estratégico, María Ibarzabal. También se espera la presencia de la vicepresidenta, Victoria Villarruel, aunque no está confirmada la asistencia del ministro coordinador, Guillermo Francos.

El objetivo del Gobierno es eliminar las PASO, aunque reconoce que no tiene los votos necesarios para lograrlo. Por eso, buscan negociar con los jefes de los bloques aliados del Senado y Diputados. Entre las propuestas que podrían respaldar se incluye la eliminación de la obligatoriedad de las primarias y la reducción del financiamiento de las boletas de los partidos políticos.

Además, el Ejecutivo tiene previsto tratar otros aspectos de la reforma electoral en Diputados, como el reempadronamiento digital de las afiliaciones, la ficha limpia, la publicidad electoral y la composición jurídica y el financiamiento de los partidos políticos. Un funcionario del Gobierno comentó que buscan que el electorado y los afiliados reafirmen su intención de pertenecer a un partido político para reestructurar el sistema y eliminar posibles irregularidades.

Sin embargo, el contenido del proyecto de ficha limpia aún no está definido, ya que existe desacuerdo en la Casa Rosada sobre qué tipo de sentencia debería impedir la participación en las elecciones. Algunos funcionarios consideran que este proyecto podría ser problemático, ya que una sentencia de primera instancia podría excluir a un candidato de la elección.

Por último, el Gobierno quiere modificar la Ley de Financiamiento de los Partidos Políticos, eliminando el límite de los aportes privados de campaña y proponiendo cambios en la fijación de aportes para publicidad y la derogación del Registro de Empresas de Encuestas y Sondeos de Opinión de la Cámara Nacional Electoral.