El comercio electrónico apuesta a las cuotas para reactivar el consumo en el segundo semestre

En un contexto de contracción del consumo, el comercio electrónico en Argentina ha mostrado una mayor resiliencia en comparación con las tiendas físicas, especialmente gracias al regreso de los planes de cuotas. A principios de 2024, el consumo cayó significativamente, afectando principalmente a los supermercados y autoservicios, mientras que el canal online mantuvo una mayor estabilidad.

Según la Cámara Argentina de Comercio Electrónico (CACE), en el primer semestre del año se registraron 102 millones de órdenes de compra online, un 1% más que en el mismo período de 2023. Además, el comercio electrónico aumentó su participación en las ventas totales, pasando del 15% al 18%. Sin embargo, la facturación del sector creció un 248%, quedando por debajo de la inflación acumulada del 271,5% en el mismo período.

Las categorías más demandadas en el comercio electrónico fueron Alimentos y Bebidas, Línea Blanca, Herramientas y Construcción, Pasajes y Turismo, y Accesorios para motos y autos. La expansión del programa oficial «Cuota Simple» en mayo fue clave para estimular tanto las compras online como las presenciales, especialmente en un contexto donde el 70% de las transacciones en línea se pagan con tarjeta de crédito.

El sector se mostró optimista de cara al segundo semestre del año, con un 65% de las empresas relevadas por la CACE esperando una mejora en el comercio electrónico. El relanzamiento de «Cuota Simple» en mayo y la reducción de las tasas de interés por parte del Banco Central han permitido que las empresas ofrezcan financiamiento en 3 a 6 cuotas, lo que ha impulsado las compras en cuotas, representando un 43% del volumen de ventas con tarjeta de crédito en el segundo trimestre.

Finalmente, se espera que eventos como el Cyber Monday, programado para noviembre, partan de una base más sólida que el Hot Sale de mayo, aunque la comparación interanual podría no mostrar un gran crecimiento debido a los incentivos al consumo en el segundo semestre de 2023 durante la temporada electoral y la anticipación de una posible devaluación.

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