El gobierno argentino está acelerando la negociación en el Congreso para aprobar el Presupuesto 2025 y avanzar en la privatización de Aerolíneas Argentinas. Esta estrategia ha sido impulsada por el conflicto con los gremios aeronáuticos y busca tratar el proyecto de privatización en la Cámara Baja, con apoyo de diputados del PRO, La Libertad Avanza (LLA) y otros aliados. El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y la secretaria general de la presidencia, Karina Milei, están liderando las discusiones, mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, busca sumar apoyos adicionales entre diputados radicales que recientemente cambiaron de postura y respaldaron un veto presidencial.

El oficialismo planea discutir la privatización de Aerolíneas Argentinas en comisiones con el objetivo de llevar el debate al recinto el 2 de octubre. Este esfuerzo incluye la construcción de una mayoría parlamentaria que involucraría a partidos como el MID, el bloque Creo de Paula Omodeo y algunos sectores del radicalismo y la Coalición Cívica. Sin embargo, se espera una fuerte oposición de los sindicatos aeronáuticos, que cuentan con el respaldo de Unión por la Patria (UxP) como muro de contención.

Paralelamente, el Presupuesto 2025 ha sido presentado y José Luis Espert, presidente de la Comisión de Presupuesto, ha iniciado contactos para su tratamiento. Las reuniones comenzarían el 1 de octubre, y se prevé la convocatoria de ministros del Poder Ejecutivo, incluyendo al ministro de Economía, Luis Caputo, quien comparecería hacia finales de la discusión. Los libertarios, junto con sus socios políticos del PRO y el MID, están decididos a aprobar el presupuesto, dado que es crucial para generar confianza financiera en el país.

El proyecto de presupuesto contempla una inflación proyectada del 18% para 2025 y estima que el dólar oficial alcanzará los $1207. Se espera un crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) del 5%, con una tendencia similar para 2026 y 2027.

Además, se propone una regla fiscal que obliga al Sector Público Nacional a obtener un resultado financiero equilibrado o superavitario a partir de 2025, priorizando el déficit cero. Sin embargo, el presupuesto suspende artículos clave de las leyes de educación y ciencia, afectando la inversión mínima en estos sectores, lo que ha generado inquietud en algunos bloques parlamentarios.

En cuanto a los tributos, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) alcanzaría los 24,71 billones de pesos, con un incremento del 0,9%, mientras que el Impuesto a las Ganancias aumentaría un 10,7%. Se planea eliminar el Impuesto PAIS, que grava transacciones en moneda extranjera, a partir de 2025. Además, se solicita autorización al Congreso para emitir títulos de deuda en moneda y jurisdicción extranjera.

El gobierno busca asegurar mayorías en el Congreso para aprobar el presupuesto y avanzar con la privatización de Aerolíneas, aunque enfrenta resistencias de sindicatos y bloques opositores, que buscarán frenar estos avances en los próximos debates legislativos.