Las plantas de reciclaje de la provincia de La Rioja, que fueron presentadas como proyectos emblemáticos para la gestión ambiental bajo el mandato de Ricardo Quintela, se encuentran actualmente paralizadas y abandonadas, lo que ha generado preocupación y denuncias por parte de la oposición. Una de las plantas más importantes es el Centro Ambiental Llanos Norte, que implicó una inversión de más de $900.000.000, pero que hoy no muestra signos de actividad alguna. La diputada provincial Nadina Reynoso, en una recorrida por el lugar, constató la falta de trabajo por parte de los recuperadores urbanos, señalando la ausencia total de movimiento en el predio. Reynoso expresó su descontento, mencionando que no hay personal trabajando ni vigilando las instalaciones, lo que resalta el estado de abandono de la planta.

Otro caso destacado es el de la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos (R.S.U.) de Chepes, en el departamento de Rosario Vera Peñaloza, que ha sido inaugurada en tres ocasiones diferentes. La primera inauguración tuvo lugar el 28 de febrero de 2012, bajo la gestión del intendente Claudio Saúl. La segunda se llevó a cabo en 2014, de la mano del gobernador Luis Beder Herrera, y la tercera fue liderada por Ricardo Quintela en 2021. A pesar de estas múltiples inauguraciones, la planta nunca ha operado adecuadamente y permanece vacía.

Un tercer centro de reciclaje, cercano a la localidad de Anillaco, también forma parte de esta serie de proyectos fallidos. Inaugurado el 20 de septiembre de 2022 por Quintela y el exministro de Ambiente Juan Cabandié, este centro ambiental está completamente detenido y vacío, sin ninguna actividad desde su apertura. Las imágenes recientes del lugar muestran un escenario de abandono total.

Estos proyectos, que representaban una promesa de progreso en la gestión de residuos y el cuidado ambiental de la provincia, se han convertido en focos de contaminación y en ejemplos del mal manejo de recursos públicos. Las inversiones multimillonarias realizadas para su construcción no se han traducido en mejoras ambientales, y su abandono está generando un creciente malestar en la población.