Las empresas de medicina prepaga han comenzado a informar a sus afiliados sobre el próximo aumento en las cuotas de los planes de salud que se aplicará en noviembre de 2024. Este incremento oscilará entre el 3,9% y el 6,9%, dependiendo de la empresa y el plan contratado. Es el quinto ajuste desde que se liberaron los precios de las prepagas en julio, tras una disputa judicial que impedía subas superiores al índice de precios. El aumento es considerado necesario por las compañías para garantizar la continuidad de los servicios médicos, argumentando que aún persisten «importantes atrasos» en los valores de las cuotas.

En este contexto, las cuotas aumentarán por encima de la inflación de septiembre, que fue del 3,5%. Además, algunas empresas también aplicarán ajustes a los copagos, dependiendo del tipo de plan de salud y de la compañía.

Por otro lado, la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) postergó hasta el 1 de diciembre la implementación de una resolución que exige a las prepagas aplicar aumentos de forma diferenciada según el plan y la región. Esta medida también obliga a las empresas a detallar los conceptos incluidos en las facturas mensuales, como el costo base del plan, coberturas específicas, ajustes por edad o riesgos, aportes recibidos y los impuestos aplicados. El retraso en la aplicación de esta normativa se debió al pedido de las compañías de medicina prepaga para adecuar sus sistemas de facturación a los nuevos requisitos.