El Gobierno reglamentó la desregulación del transporte automotor de media y larga distancia mediante la Resolución Nº 57/2024, modernizando un sistema de más de 30 años de antigüedad. Este cambio permite que cualquier vehículo en condiciones técnicas, con seguro y revisión vehicular aprobada, pueda prestar servicios de transporte de pasajeros. Los transportistas deberán registrarse de forma gratuita en la plataforma Trámites a Distancia (TAD), donde presentarán una declaración jurada (DDJJ) que incluirá información sobre vehículos, conductores y recorridos. Se unificarán los registros en el Registro Nacional de Transporte Automotor de Pasajeros (RNTAP), y se otorgará un Certificado de Alta en un plazo de cinco días hábiles.

La nueva normativa flexibiliza las operaciones, permitiendo modificar recorridos, horarios y precios de forma ágil, eliminando los largos tiempos burocráticos que antes podían extenderse hasta un año. Las empresas pueden ajustar su oferta con solo informar los cambios 15 días antes. A pesar de la desregulación, se mantienen los estándares de seguridad vial y requisitos técnicos vigentes.

El Decreto 883/24, precursor de esta resolución, había liberado las operaciones interjurisdiccionales y conexiones aeroportuarias, otorgando plena libertad para operar. Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación, invitó a todos los interesados a convertirse en proveedores de transporte, destacando que el sistema es simple y accesible.

Por otra parte, el Gobierno ratificó la obligatoriedad de garantizar el transporte gratuito a personas con discapacidad, según lo establecido en la legislación vigente. Esto incluye el cumplimiento de cupos para personas con discapacidades y derechos vinculados al Programa Nacional de Cuidado Integral del Niño, Niña y Adolescente con cáncer. A pesar de las sanciones y medidas judiciales, algunas empresas continúan incumpliendo esta obligación, lo que ha llevado al Ejecutivo a anunciar nuevas acciones para garantizar estos derechos.