El Gobierno nacional amplió el Presupuesto en más de $332.557 millones, medida oficializada a través del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 1104 publicado en el Boletín Oficial. Este ajuste busca garantizar el funcionamiento del Estado, priorizando la liquidación de salarios, jubilaciones, el pago de intereses de deuda y la amortización de letras colocadas por el Tesoro en el Banco Central para el próximo año.

Según el decreto firmado por el presidente Javier Milei y su gabinete, el refuerzo presupuestario permitirá atender gastos en personal, equipamiento, subsidios, becas y transferencias. Del total reasignado, un 60% se destinará exclusivamente al pago de intereses y amortizaciones de deuda pública. Además, se incorporaron $244.557 millones para saldar compromisos pendientes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, incluyendo retroactivos derivados de fallos judiciales.

El DNU también asignó $88.000 millones en créditos para la Secretaría de Inteligencia de Estado, tras el rechazo del Congreso a un financiamiento previo. Por otro lado, la Secretaría de Obras Públicas deberá constituir una aplicación financiera gratuita a favor del Tesoro Nacional por $1 billón, como parte del plan de ajuste.

En cuanto a la ANSES, el Gobierno redujo el presupuesto destinado a prestaciones previsionales, argumentando que la inflación fue menor a la prevista en julio. Sin embargo, se reforzaron los fondos para prestaciones por desempleo, adaptándolos a los nuevos montos establecidos. En paralelo, se disminuyó el presupuesto para la Administración de Parques Nacionales tras la finalización del financiamiento internacional del BID para proyectos turísticos.

Desde el Ejecutivo destacaron que esta ampliación es crucial para mantener la estabilidad económica y asegurar la continuidad de las funciones esenciales del Estado. El decreto se emitió en un contexto de alta demanda fiscal, donde los ajustes buscan equilibrar necesidades urgentes con las metas de sostenibilidad financiera para 2025.