El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires estimó en $414 millones el costo de los destrozos ocurridos en los alrededores del Congreso durante las protestas del 12 de marzo, que involucraron a barras bravas y militantes políticos. Esta cifra incluye la reparación o sustitución del mobiliario urbano dañado y el costo de limpieza de la zona. En total, 260 contenedores de basura fueron vandalizados, principalmente quemados o destruidos, y algunos incluso utilizados como escudos durante los enfrentamientos con la Policía.

El operativo de limpieza comenzó esa misma noche con más de 150 barrenderos y varios equipos especializados, mientras que también se registraron daños en 6 vehículos policiales, incluyendo patrulleros y motos, cuyo costo de reposición se estimó en millones de pesos. El jefe de Gobierno, Jorge Macri, condenó los actos de violencia y anunció «tolerancia cero» contra los responsables, enfatizando el uso de la ley para hacer pagar a los delincuentes por sus actos.

Durante los enfrentamientos, 20 policías resultaron heridos, varios de ellos con lesiones graves. Se detuvo a 94 personas, de las cuales 25 tienen antecedentes penales relacionados con delitos graves. Además, se identificaron a varios barras bravas, entre ellos miembros de clubes como Deportivo Español y Nueva Chicago, que participaron en los disturbios.