A través del decreto 333/2025 publicado este martes en el Boletín Oficial, el Gobierno nacional formalizó una significativa reducción de aranceles a la importación e impuestos internos para productos electrónicos como celulares, televisores, aires acondicionados y consolas de videojuegos. La medida, que forma parte de una estrategia para bajar hasta un 30% los precios al consumidor, entrará en una segunda etapa en enero de 2026, cuando los aranceles se eliminen completamente.

Concretamente, el arancel para la importación de celulares bajó del 16% al 8%, y será del 0% a partir del 15 de enero del próximo año. Además, se redujeron los impuestos internos para productos como televisores y aires acondicionados, que pasaron del 19% al 9,5%, mientras que las consolas de videojuegos bajaron del 35% al 20%.

La decisión también alcanza a la producción nacional. En paralelo, se eliminaron los impuestos internos para los celulares, televisores y aires acondicionados fabricados en Tierra del Fuego, que pasaron del 9% al 0%. Según el Ejecutivo, esto busca «disminuir los costos de fabricación, mejorar la competitividad y fomentar la inversión productiva en el sector fueguino».

Desde el Gobierno, justificaron la medida como parte de un plan para facilitar el acceso a bienes tecnológicos, mejorar la inclusión digital y alinear los precios locales con los internacionales. Según estimaciones oficiales, un celular de alta gama con tecnología 5G, que actualmente cuesta en Argentina unos US$2566, podría reducir su precio a US$1796 con el nuevo esquema. A modo de comparación, ese mismo producto cuesta US$1290 en España, US$1147 en Chile y US$1011 en Estados Unidos.

También se espera una fuerte caída en el precio de los televisores. Por ejemplo, un LED de 43 pulgadas, que hoy cuesta en promedio US$637,30 en el país, podría bajar a unos US$450, acercándose a los valores que se encuentran en Brasil.

Las nuevas condiciones estarán vigentes hasta fines de 2038 y fueron adelantadas la semana pasada por el vocero presidencial, Manuel Adorni. El Gobierno confía en que este alivio tributario impacte rápidamente en los precios y contribuya al desarrollo del mercado tecnológico argentino.