El Gobierno nacional intensificó sus críticas contra el peronismo bonaerense luego del polémico corte de luz que, en la noche del sábado, coincidió con el cierre del plazo para la presentación de listas de candidatos a las elecciones legislativas. Altos funcionarios de la Casa Rosada, incluidos los ministros Luis Caputo y Federico Sturzenegger, cuestionaron el origen del apagón y dejaron entrever que pudo haber sido una maniobra política para extender el tiempo y permitir que el oficialismo provincial llegara a un acuerdo.

El hecho cobró mayor repercusión luego de que Alejandro Dichiara, candidato a diputado provincial por la sexta sección electoral y hombre cercano a Cristina Kirchner, reconociera públicamente que el corte eléctrico «les dio un tiempito más» para cerrar las listas, en medio de fuertes tensiones entre el kirchnerismo, el gobernador Axel Kicillof y el massismo. La Junta Electoral bonaerense, en una medida excepcional, prorrogó el plazo de presentación hasta las 14 del domingo.

Críticas desde el Gabinete y la Presidencia

El ministro de Economía Luis Caputo fue uno de los más duros en sus declaraciones. En su cuenta de X, escribió con ironía: “Consultado centro de control en baja (que está en la misma sala que el COD de EDELAP), nos dicen que no tienen ni siquiera un reclamo de corte de luz en la zona. Se ve que ‘saltó un tapón’ justo antes del cierre de listas. Todo muy creíble y muy democrático”.

En la misma sintonía, el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, denunció una “falta de conciencia institucional” y advirtió: “La sociedad naturaliza que el peronismo no cumpla las reglas electorales. Imagínense si LLA fuera la que no entregaba sus listas a tiempo. Estarían gritando el fin de la democracia quienes hoy callan”, cerrando su mensaje con la sigla “VLLC” (Viva la libertad, carajo).

Por su parte, el presidente Javier Milei también se pronunció en redes sociales, sin nombrar directamente al PJ pero dejando en claro su postura: “Cuando pasan estas cosas me pregunto qué pensarán los imbéciles que acusan de violentar la República porque los modales no son de su agrado. El monstruo vive porque cuando lo ven se orinan en las patas. ¡Viva la libertad, carajo!”.

Silencio oficial y más sospechas

El episodio se tornó aún más polémico ante la falta de explicaciones por parte de la empresa Edelap, encargada del suministro eléctrico en la ciudad de La Plata, donde se produjeron dos cortes consecutivos entre la noche del sábado y la madrugada del domingo. El primero comenzó a las 22:48, justo cuando los apoderados peronistas aún no habían cerrado sus listas; el segundo afectó otra zona de la ciudad minutos más tarde.

Las interrupciones coincidieron con los desplazamientos de los representantes del PJ entre la sede de la Legislatura bonaerense y las oficinas de la Junta Electoral, ubicadas a unas 12 cuadras de distancia. Hasta el momento, ni Edelap ni la Justicia iniciaron investigaciones de oficio, lo que acrecentó las dudas dentro del oficialismo nacional.

El episodio deja al descubierto no solo la interna del peronismo en la provincia de Buenos Aires, sino también una creciente tensión institucional entre el Gobierno nacional y la principal fuerza opositora, en un año marcado por la conflictividad política y la fragilidad del sistema electoral provincial.