El Gobierno nacional profundizó su plan de privatizaciones y este viernes dio un nuevo paso clave en el sector energético. A través de la Resolución 1050 publicada en el Boletín Oficial, el Ejecutivo formalizó el inicio del proceso para desprenderse de Enarsa, la empresa estatal dedicada a la generación y distribución de energía, mediante la venta de su participación en la Compañía Inversora en Transmisión Eléctrica (Citelec), principal accionista de Transener, responsable del transporte eléctrico en todo el país.

La resolución, firmada por el presidente Javier Milei, estipula que la privatización se llevará adelante por medio de un concurso público nacional e internacional, con un plazo de ocho meses para su concreción. Actualmente, Citelec posee el 52,65% de las acciones de Transener, mientras que el 47,35% restante está en manos de Pampa Energía, empresa controlada por el empresario Marcelo Mindlin.

Este paso se enmarca en el decreto 286 firmado en abril pasado, donde el Gobierno había anticipado una privatización gradual y por etapas, con el objetivo de garantizar tanto la continuidad del servicio como el cumplimiento de las obras en curso.

La medida se da un día después de la oficialización del proceso de privatización del ferrocarril Belgrano Cargas, y marca un nuevo avance en la política de desestatización impulsada por la administración libertaria. El Ejecutivo busca reducir la participación del Estado en sectores estratégicos como el transporte y la energía, en línea con sus planes de reestructuración económica y ajuste fiscal.

Transener es una de las piezas clave del sistema eléctrico nacional, ya que gestiona más de 14.000 kilómetros de líneas de alta tensión y representa la columna vertebral del transporte de energía en Argentina. La venta de la participación estatal en Citelec podría modificar significativamente el mapa de control del sector energético en el país.