En un claro gesto de autonomía frente al Gobierno nacional, el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, anunció un aumento del 84,21% en las jubilaciones mínimas, que pasarán de $380.000 a $700.000, junto con un bono bimestral de $100.000 para quienes perciban menos de $1.300.000.

La decisión se da en un contexto de alta tensión con el Ejecutivo nacional, encabezado por Javier Milei, en medio de reclamos por la deuda de la Nación con la Caja de Jubilaciones de Córdoba, sumado a los desacuerdos por la moratoria previsional y la declaración de emergencia en Discapacidad.

El anuncio fue realizado por el mandatario provincial a través de su cuenta de X, donde recordó que la Corte Suprema de Justicia falló a favor de Córdoba, reconociendo parte de la deuda que el Gobierno nacional mantiene con la Caja de Jubilaciones. En ese marco, también destacó que se continuará con auditorías conjuntas para conciliar el monto total adeudado.

“Córdoba ha recibido parcialmente esos fondos, y cumpliendo con la palabra que les di, esos recursos van a mejorar los ingresos de los jubilados cordobeses que menos ganan y más necesitan”, afirmó Llaryora, quien justificó la suba como un acto de justicia social y cumplimiento de promesas.

El gobernador también aclaró que el aumento se mantendrá en el tiempo en tanto se sigan recibiendo los fondos de Nación, en un mensaje que refuerza la presión política sobre el Gobierno de Milei y refuerza el reclamo por mayor cumplimiento en los compromisos financieros con las provincias.

El incremento beneficiará a miles de jubilados provinciales y marca un quiebre en la política previsional, tomando distancia de la postura del Ejecutivo nacional, que hasta ahora ha impulsado una línea de recortes y ajuste fiscal.