La investigación por presuntas irregularidades en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis) sumó un nuevo giro. El celular de Diego Spagnuolo, exfuncionario del organismo y hombre cercano a Javier y Karina Milei, fue peritado y no contiene registros de conversaciones con los hermanos presidenciales, pese a la estrecha relación que mantenía con ambos.

Peritos judiciales sospechan que los mensajes fueron eliminados de manera selectiva la semana pasada, cuando trascendieron audios que lo vinculan con un presunto sistema de coimas en la compra de medicamentos. El análisis forense reveló además que el teléfono fue activado en agosto de 2024, coincidiendo con la denuncia de posibles irregularidades en contrataciones de la Andis, lo que refuerza la hipótesis de un cambio de dispositivo clave en la causa.

La Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico (Datip) logró desbloquear el aparato pese a la negativa de Spagnuolo a entregar la clave. En paralelo, presentó otro celular, aunque estaba inoperativo y no aportó datos. Los investigadores esperan recuperar los archivos borrados, un proceso que podría demorar meses, para confirmar si existieron comunicaciones con los Milei o con otros funcionarios señalados en los audios, entre ellos Karina Milei y Eduardo “Lule” Menem.

La pesquisa también avanza sobre los teléfonos de otros implicados, como el exfuncionario Daniel María Garbellini y los empresarios Jonathan y Emmanuel Kovalivker, dueños de la droguería Suizo Argentina. Mientras Jonathan entregó voluntariamente un iPhone en Comodoro Py, los peritos aún intentan acceder al de su hermano con asistencia de la firma israelí Cellebrite.

Con más de 80 ingresos a Casa Rosada y Olivos en 2024, Spagnuolo era considerado un hombre de confianza en el círculo presidencial. Ahora, la sospecha de que borró chats comprometedores lo ubica en el centro de un escándalo que amenaza con profundizarse en los tribunales y en la arena política.