El presidente Javier Milei aseguró que no vetará el Presupuesto 2026 en caso de que sea aprobado por el Senado, aunque advirtió que realizará ajustes en las partidas para garantizar el cumplimiento del objetivo de déficit cero. En declaraciones televisivas, defendió el esquema fiscal del Gobierno y remarcó que el equilibrio de las cuentas públicas se alcanzará “sin subir impuestos”.
El mandatario sostuvo que la media sanción obtenida se apoya en la “base de déficit cero” y despejó así las dudas sobre un eventual rechazo de la ley. No obstante, subrayó que el orden fiscal será una prioridad innegociable y que se aplicarán las correcciones necesarias para sostenerlo.
Milei también se refirió al malestar del PRO por la disputa en torno a los cargos en la Auditoría General de la Nación y negó haber traicionado a Mauricio Macri o haber sellado acuerdos con Sergio Massa o el kirchnerismo. En ese sentido, recordó que durante su gestión Cristina Kirchner “terminó presa” y rechazó las acusaciones de pactos políticos encubiertos.
En materia judicial y deportiva, fue contundente al señalar que “si una persona comete un delito, tiene que pagar”, aludiendo a la investigación sobre la AFA, y criticó duramente la conducción de Claudio “Chiqui” Tapia, a quien acusó de “estar destruyendo el fútbol argentino”.
En el plano económico, el Presidente confirmó que en enero se afrontará el pago de una deuda por US$4300 millones y aseguró que el Gobierno cuenta con liquidez y opciones de financiamiento. Defendió el esquema de bandas de flotación cambiaria, anticipó que la inflación “va a empezar con cero” el próximo año y reiteró que no se tomará nueva deuda. Además, destacó un cambio en la matriz de consumo, con fuerte crecimiento del comercio electrónico.
En cuanto a su futuro político, Milei afirmó que su carrera presidencial será de “cuatro u ocho años” y que una eventual reelección dependerá exclusivamente de la voluntad popular. A nivel internacional, calificó al presidente venezolano Nicolás Maduro como un “narcoterrorista dictador” y evitó pronunciarse sobre el mandatario brasileño Lula da Silva.


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